El presidente de la Junta de Andalucía, José A. Griñán, cambió su agenda el pasado viernes deprisa y corriendo para evitar encontrarse con el SAT en El Coronil.
Griñán tenía previsto inaugurar una planta fotovoltaica en El Coronil y visitar el Ayuntamiento.
El SAT no pretendía boicotear esta visita sino aprovechar la presencia del presidente de la Junta en El Coronil para exponerle la angustiosa situación de los 1200 parados y paradas que tiene este municipio y las alternativas que este sindicato defiende.
Este sindicato no puede entender como un presidente como Griñán que se reúne con banqueros y empresarios, con artistas y famosos no es capaz de tener la cortesía de recibir a los trabajadores y trabajadoras de un pueblo tan emblemático para la lucha obrera y popular como es El Coronil.
El Gobierno le recibe finalmente, tras concentrarse ante el Ayuntamiento.La delegada de la Junta en la provincia de Sevilla, Carmen Tovar, recibió a una comisión del sindicato y se comprometió a elevar las reivindicaciones ante el Gobierno andaluz.
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