La policía local y la GMU controlaron los cotillones de fin de año

Por parte de la Policía Local de Sanlúcar se procedió en la noche de fin de año al cierre de tres establecimientos que tenían previsto realizar cotillones sin la pertinente licencia municipal.

El importante despliegue policial realizado desde la delegación municipal de Seguridad Ciudadana ha sido la culminación de un trabajo en el que han colaborado distintas administraciones y entes públicos, desde la Junta de Andalucía mediante la Policía Autonómica, el Ministerio del Interior con el Cuerpo Nacional de Policía, o el Ayuntamiento mediante la Gerencia Municipal de Urbanismo y la Policía Local.

Desde hacía cerca de un mes la Gerencia Municipal de Urbanismo ha estado realizando el seguimiento a distintos cotillones de los cuales se tenía conocimiento, decretando la clausura y el cierre de aquellos que no reunían las garantías de seguridad previstas para este tipo de eventos y coordinando con la Policía Local la ejecución de estos precintos.

No obstante, y a pesar de las advertencias realizadas para que no se celebraran estos cotillones sin las pertinentes licencias, se pudo comprobar el mismo día 31 por la noche que algunos de los organizadores habían cambiado los lugares de celebración para intentar evitar el cierre y la clausura prevista. En cualquier caso, esta maniobra no sirvió de nada gracias a la labor tanto de la Policía Local como del Cuerpo Nacional de Policía que pudieron evitar la celebración de dos de ellos en el último momento. También se llevó a cabo el desalojo de un tercero que contaba con pésimas medidas de seguridad e higiene y que podía haber provocado problemas de graves consecuencias.

Además la Policía Local estuvo comprobando el aforo de otros establecimientos para evitar que se sobrepasara y el acceso de menores a los mismos, así como que se cumplieran con las medidas de seguridad previstas conforme a la Ley.

Sí cabe destacar, que por lo demás la noche de fin de año se saldó sin graves incidentes, atendiendo algunos servicios como la detención de una persona sobre las 22:00 horas, por tentativa de robo en un domicilio, que pudo llevarse a cabo gracias a la colaboración de los propietarios de una vivienda de La Jara; varias asistencias sanitarias por intoxicaciones etílicas y requerimientos por molestias y ruidos entre vecinos o por tirada indiscriminada de petardos.