Irene García destaca que el balance “no puede ser más decepcionante” en aspectos como empleo, políticas sociales y asistencia a municipios.
La portavoz dice que “el caso de la Escuela Fernando Quiñones es buen ejemplo de la improvisación y el oscurantismo del Gobierno provincial”
La portavoz del Grupo Socialista de la Diputación, Irene García, ha realizado un balance de la actuación del Gobierno del PP en la Corporación al cierre de 2012, “un año que ha estado marcado por una nula gestión”. De esta manera, la portavoz socialista ha destacado que “el primer ejercicio completo en el que el Partido Popular ha ostentado la responsabilidad de marcar las líneas maestras de actuación y de ejecutar las prioridades en el ámbito provincial no puede ser más decepcionante. Y lo ha sido, precisamente además, en las tres áreas que el propio presidente Loaiza destacó como sus prioridades de mandato durante su discurso de investidura como la aplicación de políticas de empleo, el mantenimiento de las políticas sociales y la asistencia a municipios”.
“Dejando a un lado el lamentable saldo de la cerca de una docena de planes de empleo impulsados por el Gobierno de la Diputación y el hecho innegable de que la provincia cuenta hoy un 25 por ciento más de parados que en el momento en que Loaiza accedió a la Presidencia hace año y medio, no puede decirse que el PP haya dado muestras de una enorme apuesta por la generación de trabajo, toda vez que no llegó a ejecutar ni un euro de los dos millones con los que iba a contar el plan de empleo incluido en los Presupuestos para 2012 y que se subordinaban a la venta de dos inmuebles que jamás de enajenaron”, ha dicho la portavoz, para señalar también que “ni siquiera a medio plazo parece que se vaya a hacer realidad esa retórica defensa del empleo, porque los votos del PP han impedido que los Presupuestos para 2013 incluyan un plan específico dotado con un mínimo de cuatro millones de euros para generar jornales en los municipios menores de 25.000 habitantes como habíamos planteado desde el Grupo Socialista”.
Irene García ha asegurado que “el Gobierno del PP en la Diputación tampoco va a pasar a la historia por sus desvelos en materia de políticas sociales, cuando en este último mes se han firmado los decretos para el pago del servicio de atención a domicilio, en algunos casos correspondiente al primer semestre del año, con lo que se ha obligado a los pequeños municipios a soportar esa carga económica durante casi un año entero”. Por otro lado, 2012 también ha destacado por “la desaparición de algunos instrumentos que eran fundamentales para los municipios, como el programa de Cooperación Cultural (COCU), lo que ha supuesto una pérdida del liderazgo de Diputación también en esta materia, con los lógicos perjuicios para las localidades más pequeñas”.
La portavoz se ha referido igualmente a la “dudosa apuesta por la asistencia a municipios”, en un año que ha incluido episodios de “desigualdad de trato” a unos y otros por parte del Gobierno provincial. “El principal exponente de esa diferencia de tratamiento es la permisividad con la ruptura del convenio de recaudación por parte del Ayuntamiento de Jerez, lo que supuso una grave amenaza para las arcas de la propia Diputación”, ha asegurado Irene García, quien también ha recordado que ese mismo Consistorio ha sido objeto de “una insólita flexibilidad a la hora de permitirle acumular deuda con el Consorcio de Bomberos, una circunstancia que también puso a ese ente en una situación ciertamente alarmante”.
“El presidente Loaiza ha dicho recientemente que la Diputación pretende recuperar la confianza de la ciudadanía y ha defendido las políticas del Gobierno central que él mismo califica como reformas. Sin embargo, entre los constantes recortes de Mariano Rajoy, que no son reformas sino prácticamente derribos del Estado del Bienestar, y la falta de gestión de su propio Gobierno, Loaiza difícilmente conseguirá recuperar esa confianza que hoy es más necesaria que nunca tanto para los municipios de la provincia como para el conjunto de la ciudadanía”, ha asegurado Irene García, quien ha añadido que “a la hora de recuperar esa confianza será imprescindible tanto que el Gobierno provincial abandone su estrategia de hacer una constante oposición a la Junta de Andalucía como que haga valer su peso institucional en su relación con otras administraciones como el Gobierno de la Nación, frente al cual este año se han sucedido los episodios de debilidad cuando se ha tratado de reinvindicar los intereses de la provincia en asuntos tales como la contratación de la segunda fase de los Buques de Acción Marítima (BAM)”.
La Escuela Fernando Quiñones, “ejemplo de improvisación y oscurantismo”
La portavoz del Grupo Socialista de la Diputación se ha referido al episodio vivido en torno a la Escuela de Hostelería Fernando Quiñones de Cádiz como “un buen ejemplo de la improvisación y el oscurantismo del Gobierno provincial, que después de más de un mes desde la clausura de sus cocinas y desde que tuvo que buscar un nuevo emplazamiento para reanudar las clases sigue sin haber decidido qué hacer para solucionar esa situación”. Irene García ha lamentado que “el presidente Loaiza esté dando palos de ciego y no ha sido capaz de encontrar una salida que tranquilice a la comunidad educativa y que satisfaga la legítima reclamación de la ciudad de Cádiz de que esa institución mantenga sus raíces gaditanas”.
Irene García ha señalado que “primero se dijo que el traslado de la Escuela a Chiclana era inevitable; ahora, más de un mes después de que comenzara toda esta historia, se asegura que no hay nada cerrado y el propio presidente Loaiza admite hasta siete posibilidades distintas, entre ellas la de la permanencia en la ciudad de Cádiz”. Por este motivo, ha lamentado “la imposición del primer momento cuando se presentó la salida de Cádiz como inevitable; la improvisación de la que se ha hecho gala durante todo este tiempo sin ofrecer una respuesta satisfactoria; y el oscurantismo en el que se incurre ahora que se admite la existencia de numerosas alternativas pero sin aclarar ninguna”.
“Tanto la ciudad de Cádiz en general, que siente como propio un centro de excelencia en el sector turístico, como los alumnos y profesores de la Escuela Fernando Quiñones, que ven amenazada su formación y su estabilidad laboral, merecen que el Gobierno de la Diputación abandone esas pautas de comportamiento tan alejadas de la eficacia en la gestión de las instituciones y se aplique a la búsqueda de una solución satisfactoria para todas las partes. Y que lo haga además teniendo en cuenta tanto los criterios técnicos como las demandas de los propios implicados en el día a día de la Escuela”, ha concluido Irene García.
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