El Inspector Accidental Jefe de la Policía Local, Rafel Ávila, suponemos que, a instancias del alcalde, Víctor Mora, con la excusa de calificar de “incidentes graves que pusieron en grave riesgo la integridad física del alcalde y la de los miembros del equipo de gobierno” lo ocurrido tras el Pleno Municipal de octubre, ha decidido establecer un nuevo protocolo de actuación en el servicio de protección del ayuntamiento.
El tiempo está demostrando que solo cabe en el imaginario interesado del Inspector Accidental-Jefe y, por supuesto, del propio Víctor Mora afirmar que se puso en grave riesgo la integridad física del alcalde, de la misma manera que la denuncia de la existencia de instigadores de los incidentes fue infundada, con la única intención de criminalizar la acción política de IU, ya que nada se ha demostrado de las supuestas investigaciones llevadas a cabo.
Las nuevas medidas de seguridad adoptadas en el Ayuntamiento son absolutamente innecesarias y arbitrarias, solo pueden responder al miedo de un alcalde que no fue elegido como tal por los sanluqueños, incapaz de dar soluciones a los verdaderos problemas de la ciudad e impotente para poder dar explicaciones al cúmulo de irregularidades que jalonan su gestión y que quiere hacer del victimismo su principal aval político.
En los últimos días hemos denunciado que los vehículos de la policía local no salen de patrulla porque no tienen pasada la reglamentaria ITV, dejando desprotegidos a los sanluqueños, sin embargo, Víctor Mora, no escatima medidas y recursos personales para procurarse seguridad en el ayuntamiento, sin que existan verdaderas razones que lo justifique.
Víctor Mora, debería dedicarse a evitar las arbitrariedades que presuntamente se estarían cometiendo en el reparto de cheques de alimentos, libros, en la contratación temporal en los programas de Empleo Joven y mayores de 30, pero no quiere encontrarse en el ayuntamiento a ninguno de los agraviados y pretende levantar muros físicos para impedir a los sanluqueños informarse de su derecho a percibir las ayudas sociales de cualquier tipo.
Para IU Sanlúcar, el aislamiento de Víctor Mora es una nueva prueba de que la alcaldía le viene grande y de que su periodo al frente del ayuntamiento está acabado y amortizado para los sanluqueños y estas reacciones, propias de tiempos pasados, son el reflejo de quien se sabe ya con un pie y medio del otro fuera de la alcaldía. En cualquier caso, creemos que son los sanluqueños quienes deben ser protegidos de este alcalde.
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